Didier Barral ha recorrido un largo camino desde que se instaló en el esquisto de su padre, en Lenthéric, a principios de los años noventa. Con la ayuda de su hermano Jean-Luc, este viticultor obstinado y visionario ha introducido un método de cultivo que respeta el ecosistema y favorece la interacción entre los reinos vegetal y animal, siempre en busca de una expresión auténtica de su terruño. En bodega, la vendimia es muy sana y las uvas de excelente constitución, por lo que el proceso de maduración es "bíblicamente" sencillo.
Los vinos de Didier Barral son únicos, profundamente originales y noblemente rurales, lo que los convierte en uno de los vinos imprescindibles del Languedoc.
Los vinos:
- El blanco es una mezcla de terrets blancos y grises. Con una nariz de hierbas aromáticas, un final largo y un regusto a pedernal, es un blanco complejo para poner sobre la mesa.
- El tinto Faugères tiene una nariz de piedra mojada. En boca está bien definido, con especias y notas florales.
- El Jadis, envejecido en madera durante dos años, tiene una nariz de enebro. Los taninos están envueltos por una sensación empolvada y toques de regaliz en el final.
- Valinière es una cuvée que combina Syrah y Mourvèdre sin raspón de orientación norte: un vino paciente, con una estructura aún estricta y un carácter muy picante. Un vino de largo recorrido